Pueden enumerarse una gran cantidad de objetivos cumplidos por este gobierno. Recuperación económica, mayor cobertura de la seguridad social, mejoras educativas, reforma del calendario de vacunación obligatoria, juicio y castigo a los culpables del genocidio de los ´70. Pero hay un logro que es esencial a la hora de pensar en un cambio serio en la dirección política de este país, y es la exposición de la batalla por el poder que se da entre la política y las corporaciones económico-mediáticas.