sábado, 25 de febrero de 2012

Reacciones post-tragedia

Lo primero, como corresponde y además siento, envío mi más sincero cariño para todas las familias que resultaron damnificadas por la terrible tragedia ferroviaria sucedida en la estación de Once. Lamento profundamente todas las vidas peridadas, y las aún más afectadas por el siniestro. También lamento el desagradable uso político que tantos opositores le han dado al tema. Es muy triste perder a un ser querido, y peor debe ser la sensación de que a nadie le importa algo más que aprovechar para aumentar un poco su venido abajo capital político.